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El alcalde de Kansas City, Quinton Lucas, ha presentado datos sobre la disminución de homicidios en la ciudad, destacando la reducción del 21% en comparación con el año pasado y del 16.7% respecto al promedio de los últimos cuatro años.

Sin embargo, también resaltó un aumento del 15% en tiroteos no mortales en comparación con el año anterior y un 4.8% respecto al promedio de cuatro años.

En este sentido, el alcalde ha expresado la necesidad de fortalecer los programas de prevención, especialmente dirigidos a los jóvenes, y de intensificar los esfuerzos para retirar las armas de las calles. Este llamado cobra especial relevancia después de su participación en una reunión en Washington D.C. sobre la prevención de la violencia armada a finales de septiembre.

Quinton Lucas ha subrayado la importancia de que los niños no vivan con miedo a la muerte en las calles o en las escuelas, y ha señalado que los esfuerzos para quitar las armas de las manos de abusadores domésticos y menores, junto con la mejora en los controles de armas y la inversión en cuerpos policiales, han contribuido a la disminución de homicidios tanto a nivel nacional como en Kansas City.

A pesar de los avances logrados, el alcalde ha enfatizado que aún queda mucho trabajo por hacer para proteger a los niños y a las comunidades. Sus declaraciones reflejan un compromiso firme con la seguridad y el bienestar de los ciudadanos, así como una clara conciencia de los desafíos que aún persisten en materia de violencia armada.

Quinton Lucas ha demostrado estar al tanto de la situación en su ciudad y ha presentado un enfoque integral que busca abordar tanto las causas como las consecuencias de la violencia armada. Sus palabras reflejan un llamado a la acción y a la colaboración de diversos sectores de la sociedad para trabajar en conjunto en la construcción de comunidades más seguras y pacíficas para todos.