Inmigración: punto de consenso, pero secundario en el debate republicano
El primer debate de las primarias republicanas, celebrado en Milwaukee, abordó el tema migratorio en EEUU, aunque sin demasiado énfasis. Algunos candidatos insistieron en políticas ya emprendidas por el expresidente Donald Trump, como la continuación del muro fronterizo o el despliegue de tropas.
WASHINGTON / MIAMI, EEUU — El tema migratorio en Estados Unidos, aunque es de preocupación para políticos liberales y conservadores, no fue precisamente el centro de atención en el debate de las primarias republicanas de este miércoles. La mayoría de candidatos expuso medidas tan o más agresivas que las que caracterizaron los cuatro años de gobierno del expresidente Donald Trump.
En su primera interacción pública televisada desde Milwaukee, los ocho precandidatos republicanos participantes coincidieron en la necesidad de un mayor control para frenar los cruces fronterizos ilegales, contratar más agentes de la Patrulla Fronteriza e incluso darle continuidad al desafiante proyecto de terminar el muro a lo largo del límite con México.
“El debate republicano ha demostrado que existe una democracia dentro de nuestro partido, de lo que está hablando la mayoría de los candidatos es que tenemos que reforzar nuestra frontera”, dijo a la Voz de América el analista político republicano Félix García.
Los asuntos migratorios en Estados Unidos han marcado un punto candente en la política doméstica y de exteriores del gobierno de Joe Biden.
Desde su llegada a la Casa Blanca en 2021, Biden echó a andar su proyecto migratorio, traído de sus promesas de campaña, pero el arribo masivo de inmigrantes sin la documentación requerida –principalmente por la frontera suroeste- atrajo las críticas de los rivales republicanos achacándole al presidente demócrata una permisibilidad nunca vista.
La mayoría de los precandidatos en el debate se decantó por la «mano dura» en cuanto al límite sur con México y la emprendió contra la política migratoria de Biden. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, conocido por sus políticas contra la inmigración irregular, apostó por la militarización de la frontera.
DeSantis dijo que «no enviaría tropas a Ucrania pero sí a la frontera sur» por donde “los traficantes de drogas están ingresando fentanilo”.
“Si estás atravesando un muro fronterizo en territorio soberano de Estados Unidos y estás tratando de envenenar a los estadounidenses, terminarás muerto como una piedra”, advirtió el republicano.
La epidemia de drogas, especialmente de fentanilo, acaparó las discusiones de los demás aspirantes a ocupar la Oficina Oval.
Vivek Ramaswamy emergió como el sorpresivo protagonista del primer debate republicano de este miércoles. El empresario tecnológico, hijo de migrantes indios, señaló que «una frontera abierta» no es una frontera.
Por su parte el exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie propuso dejar de «recompensar» a los inmigrantes que llegan sin documentos migratorios a Estados Unidos.
Hace dos años Biden designó a la vicepresidenta Kamala Harris al frente de los asuntos migratorios. Harris ha presidido los encuentros con mandatarios y altos cargos de México –la más cercana nación al suroeste de EEUU-, así como con los de Guatemala, Honduras, Costa Rica y otros.
La Casa Blanca ha establecido, entre otros, un sistema de otorgamiento de parole humanitario para aspirantes de Venezuela, Nicaragua, Cuba y Haití.
Entre las medidas también ha implementado el establecimiento de las Oficinas de Movilidad Segura en unas tres naciones en Centroamérica, a fin de facilitar el reasentamiento de solicitantes de asilo. Una acción emprendida en conjunto con la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR, por sus siglas en inglés).
La Administración Biden ha rechazado desde un inicio haber impulsado una política de frontera abierta, pero los precandidatos, en su mayoría, acusaron la acusaron igual de abrir la frontera, a pesar de que, tras las últimas medidas implementadas por el gobierno, el número de cruces en la frontera sur se ha reducido a cifras no vistas en años.
El senador por Carolina del Sur, Tim Scott, dijo estar a favor de eliminar las denominadas ciudades santuario, volver a instaurar el Título 42 y seguir con la construcción del muro fronterizo, un proyecto ampliamente acariciado por Trump.
Maca Casado, la portavoz Comité Nacional Demócrata en todo el país concluye que en declaraciones a la VOA: “El presidente Biden heredó un sistema migratorio y una situación migratoria caótica. En la administración previa enjaulaban niños, los separaba en la frontera, la situación en la frontera era caótica”.
[Parte de la información para este reporte la proporcionó la periodista Paula Díaz, de la Voz de América]
Fuente: Vozdeamerica.com