Hermanos Villalobos: “Nuestra misión es cambiar el cliché negativo del inmigrante”
Luego de estudiar música en prestigiosas instituciones internacionales, el trío de violinistas de origen mexicano Hermanos Villalobos busca educar y poner en alto el nombre de los latinos en EEUU a través de su talento.
Manassas, Virginia, EEUU — La familia Villalobos, consciente del poder de la música y las palabras, decidieron unirlas para ofrecer a su público mensajes enfocados sobre todo en borrar estigmas asociados a la inmigración.
Bajo este concepto, el trío de violinistas creó en 2005 el proyecto “Villalobos Brothers” o Hermanos Villalobos, para cantar y componer fusionando la música clásica con el folclore de su natal Veracruz, en México.
“Es realmente un privilegio poder poner palabras encima de algo que ya de por sí es tan bello como la música. En el momento en el que le sumas las letras a la música se vuelve algo muy poderoso porque estás comunicando a varios niveles: a nivel musical, que es un lenguaje universal y con un mensaje muy específico, que puede ser de amor, de hermandad, de justicia social, de cambio”, dijo a la Voz de América Ernesto Villalobos, el mayor de los hermanos.
De esta manera, los Villalobos Brothers han recorrido el mundo llevando su mensaje de unidad, con el tema migratorio como uno de sus pilares porque como ellos mismos afirman, es algo con lo que les ha tocado vivir.
Este trío de violinistas mexicanos está de visita en el área metropolitana de Washington para ofrecer un único recital el sábado 26 de octubre en el Hylton Performing Arts de Manassas, Virginia, pero al mismo tiempo compartir su talento y sus enseñanzas con jóvenes estudiantes y personas interesadas en el poder de la música y su trabajo fusión.
«Somos ciudadanos del mundo»
“Desde muy jóvenes hemos vivido la inmigración constantemente. Vivimos hasta los 18 años en México y desde entonces cada uno de nosotros hemos sido inmigrantes en otros países”, cuenta Alberto Villalobos, otro de los hermanos.
Los Villalobos dejaron la mexicana Veracruz en busca de nuevos horizontes y conocimientos musicales. Fue así que Ernesto viajó a Estados Unidos gracias a una beca para estudiar su maestría en Nueva York. Lo propio hicieron sus hermanos Alberto en Bélgica y Luis en Alemania.
“Después que todos estudiamos nuestras maestrías en música clásica, violín y composición no nos sentíamos representados y quisimos expresar algo original en donde también pudiéramos utilizar nuestra voz como instrumento y empezamos a fusionar nuestras composiciones con elementos de la música tradicional de Veracruz», cuenta Luis Villalobos.
De esta manera, el jarocho y el huasteco veracruzano -música típica de su región natal-, se entremezclan con el latin jazz y el rock para dar vida a sonidos propios con un valor social añadido.
Gracias a su música y a sus mensajes, los Villalobos Brothers han podido llegar a un público global pisando escenarios reconocidos como el Carnegie Hall y el Rockefeller Center de Nueva York, junto al Hylton Performing Arts en Virginia. Incluso, fueron convocados para participar en una producción de la mano del maestro Arturo O’Farrill, la cual obtuvo un Grammy en la categoría de Mejor Album Latin Jazz.
“Siempre me sorprendo de la receptividad del público. A pesar que la mayoría de las canciones que hacemos son en español, el público responde de manera positiva sea hispano, americano, gente de Asia y eso a mí me da esperanza porque estamos hablando de las emociones y la gente se conecta”, confesó a la Voz de América Luis, el menor de los Villalobos.
“Creo que nuestra misión es intentar a través de nuestro ejemplo cambiar esa imagen, esos clichés negativos que se tienen del inmigrante de EEUU”, insistió.
Los Villalobos Brothers están muy identificados con sus raíces latinas y a pesar que se consideran «ciudadanos del mundo» aseguran estar felices de poder transmitir con su música valores como la hermandad y la igualdad siendo «Somos» uno de sus temas preferidos.
«Este tema nos lleva a pensar más allá de nuestra nación y de ser latino. Los humanos somos 99.6 % iguales, así que es absolutamente ridícula esa fijación que tenemos en enfocarnos en nuestras diferencias. Somos una gran familia y este tema empieza a nombrar a todas esas nacionalidades», afirma Luis Villalobos.
“Somos africanos, somos bolivianos, somos gente de raíces fuertes, somos fuego y somos verdad… el mensaje que quiero dar es de humanismo, ese es el futuro, no más fronteras y mas bien un abrazo realmente fraternal y universal entre naciones y entre seres humanos», finaliza el músico.
Educadores por excelencia
Los hermanos Villalobos no sólo disfrutan y se divierten cuando están sobre el escenario, sino también compartiendo sus conocimientos. Enseñan en varias escuelas en Estados Unidos y trabajan conjuntamente creando currículas musicales en múltiples instituciones educativas.
«Participamos de lecturas, demostraciones, interacciones con los estudiantes y eso crea una experiencia muy fuerte. Es muy importante poder compartir con los niños porque ellos tienen la oportunidad de visualizar una realidad que si bien puede ser remota pueden llegar a crear algo en su mente y eso es vital», afirma Alberto Villalobos, quien recuerda que gracias a sus padres desde muy pequeño tuvo ese primer acercamiento musical que impactó en su vida.
En su visita a Virginia, los hermanos Villalobos realizaron una serie de actividades con la comunidad fuera de los escenarios, como una manera de reducir la distancia entre el artista y el público.
«El propósito de este programa es conectar a los artistas con los miembros de la comunidad. Queremos que los artistas tengan más oportunidades de conectarse y que los miembros de la comunidad los conozcan como artistas, pero también como seres humanos. (…) Ha tenido gran éxito porque permite llevar el arte fuera de nuestros espacios tradicionales a lugares donde de otra manera las personas no tendrían acceso», dijo a la VOA Adrienne Bryant Godwin, directora de programación de arte y visuales del Hylton Center.
Fuente: Vozdeamerica.com